121. CIUDAD DE DIOS

CIUDAD DE DIOS,  2002

(CIDADE DE DEUS) 120´                                              FERNANDO MEIRELLES

“La Favela había sido un purgatorio. Se volvió un infierno.”

Buscapé

Fernando Meirelles nos muestra con Ciudad de Dios un fresco social donde la marginalidad es la gran protagonista. La película supone un recorrido de veinte años entre delincuencia, violencia y perdición, abriendo sin embargo también una pequeña rendija a la esperanza en la figura de Buscapé, un niño obcecado por no caer en las trampas de la favela en la que está condenado a vivir.

Sorprende como su director utiliza sin ningún tipo de tapujos todo tipo de recursos cinematográficos y lo hace con una excelente adecuación a la propia historia y al estilo necesario para cada momento. No resulta en ese aspecto forzado el uso de la voz en off, de los flashbacks o del uso de la cámara en mano por poner solo unos pocos ejemplos de técnicas presentadas a lo largo de las dos horas de metraje.

Ciudad de Dios es una película difícil de digerir pero que a la vez atrapa al espectador por la inteligencia que muestra su director a la hora de contar una historia tan dura como visualmente atractiva.

 ME GUSTA: El parecido físico entre los niños que dan vida a los personajes principales y estos en su etapa juvenil, lo que enfatiza aún más el aura de realidad y verdad que impregna la cinta.

NO ME GUSTA: La anodina primera experiencia de Buscapé.

FRASE RESUMEN: Las cámaras de cine se adentran en las favelas.