THE EQUALIZER, 2014
(THE EQUALIZER) 132´ ANTOINE FUQUA
“Cuándo uno pide que llueva tiene que aguantarse con el barro.”
Robert McCall
Antoine Fuqua y
Denzel Washington vuelven a unir su talento tras Día de entrenamiento, el
primero como uno de los directores que mejor maneja y filma las secuencias de acción
del momento y el segundo como un monstruo interpretativo cuya sola presencia en
pantalla hace sumar puntos a cualquier trabajo en el que participe.
Y la compenetración de
ambos queda patente en esta revisitación del género de los justicieros en el
cine, tan en boga a finales de los setenta y primeros ochenta. Sin embargo no
todo queda relegado a unas sublimes escenas de acción que no escatiman a la
hora de plasmar la violencia en pantalla, y de esta manera podemos deleitarnos
con la evolución y las maneras de un personaje tan rico en matices como es
aquel al que da vida Denzel Washington.
Con The equalizer
Fuqua nos invita al viaje inverso al vivido por el protagonista, un hombre de
acción que tras decidir dejarlo todo y convertirse en un tipo anodino decide
sacar a la bestia que lleva dentro, aunque se entiende si la persona a defender
es la dulce Chloë Grace Moretz.
ME
GUSTA: El
momento en que vemos en el club ruso y por primera vez de que es capaz el
personaje de Denzel Washington, y en solo diecinueve segundos.
NO
ME GUSTA: Deja escapar el final más lógico, aquel que muestre a Robert McCall
empezando nuevamente de cero.
FRASE RESUMEN: Los
malos encuentran la horma de su zapato.